Bill Belichick y su verdadero legado en la NFL

El pasado domingo sucedió algo realmente impresionante, los Patriots de Nueva Inglaterra despedazaron 45-0 a los Chargers de Los Ángeles.

Pero, ¿por que impresionante?, por varias razones, una de ellas sería que al comparar el talento de los rosters de ambos equipos, no parece una diferencia de 45-0, eso es una diferencia entre Alabama y una universidad de segunda división; pero la razón más importante es Bill Belichick.

En una temporada donde los Pats:

Perdieron al Quarterback más grande de la historia de la franquicia, nueve jugadores decidieron no participar en la temporada por el COVID-19, múltiples titulares se fueron en la agencia libre, perdieron asistentes de elite, carecen de estrellas ofensivas y tuvieron que implementar un nuevo sistema ofensivo sin pretemporada, debido a la abismal diferencia de estilos entre Tom Brady y Cam Newton, con todo eso en contra, Belichick tiene a este equipo 6-6, a dos jugadas de un 8-4.

La importancia de los coordinadores y asistentes pasa desapercibido hasta que uno ve a equipos como Atlanta y Filadelfia, que luego de perder a Kyle Shanahan y Frank Reich, no se han visto igual, aun cuando ambos se fueron después de que sus equipos llegaran al último partido del año para perseguir el sueño de ser entrenador en jefe en San Francisco e Indianápolis respectivamente.

Belichick perdió a Brian Flores, entrenador de Miami, y Joe Judge, entrenador de los Giants, que parece ser que ambos van encaminados a un gran futuro como los antes mencionados y Bill no se desintegró como si lo hicieron Dan Quinn y Doug Pederson.

Puedes juzgar a alguien por su capacidad para lidiar con situaciones de crisis, por ejemplo Mike Tomlin, que en 14 años jamás ha tenido una temporada perdedora, el único en la historia en lograr algo semejante, ha tenido que superar el constante drama de gente como Antonio Brown, Le’Veon Bell o Ben Roethlisberger, la partida de estrellas como Mike Wallace o Emmanuel Sanders o incluso el retiro de leyendas como Troy Polamalu, la temporada pasada estuvo a un juego de meterse a postemporada con Mason Rudolph y Devlin Hodges como sus mariscales. Otro ejemplo sería Sean Payton, que este año está demostrando cómo ganar partidos con tú histórico pasador lesionado a base de una buena defensa y una ofensiva versátil

Por otro lado, Cam lanzó 69 yardas contra los Chargers, si alguien me hubiera dicho que este partido se ganaba con Newton lanzando eso, hubiera pensado en un marcador de 9-7 o algo similar, jamás 45-0. Por el amor de Dios, el ex-Auburn lleva más victorias (6), que pases de anotación (5).

Otro ejemplo del maravilloso coacheo de Bill es Gunner Olszewski. El orgullo de la Universidad Bemidji State (si, yo tampoco se en que estado se encuentra), que bien podría ser un jugador de hockey de los 80’s, anotó sus primeros dos touchdowns en el encuentro ante los angelinos, situación que hemos visto a Belichick repetir una cantidad absurda de veces con jugadores desconocidos que hace impactar un juego.

No es que Anthony Lynn no pueda coachear, pero esto se acabo a los 7 minutos. Un partido entre Jets y Chiefs hubiera sido más competitivo, no digo que todo el juego, pero más de 7 minutos seguro sí. Pero ¿por qué?, ¿es porque Justin Herbert es novato y Belichick históricamente abusa de ellos?, ¿por el clima?, ¿por los equipos especiales?.

En la vida muchas veces las respuestas son mucho más evidentes de lo que uno quiere ver. No hay mayor explicación que William Stephen Belichick, el mejor entrenador en la historia de la NFL.

Por: Mariano Bonfil

Foto: Especial