La relación tóxica de Aaron Rodgers y los Packers

Ayer por la mañana se reportó que el actual MVP de la liga, Aaron Rodgers, no quiere regresar la próxima temporada con los Packers de Green Bay debido a la pésima gestión, a como lo ve el histórico pasador, que ha tenido el equipo, privándolo de la posibilidad de tener el éxito deseado.

Si hay alguien que ha sido crítico del número 12 de los Cabezas de Queso he sido yo, señalando a cada oportunidad que se me presenta la falta de liderazgo, de capacidad de venir de atrás y remarcando esa mentalidad segundona que lo suele caracterizar cuando se va atrás en el marcador, pero esta vez le doy la razón.

No es fácil trabajar en un lugar en el que dan por sentado tus capacidades, que asumen que por tu habilidad no necesitan rodearte de más talento, que particularmente en la NFL es un pésimo enfoque como pudimos comprobar con Tom Brady buscando un equipo que lo arropara y quitara presión en vez de someterlo a más, llevándolo a ganar su séptimo anillo de Super bowl

Los Packers han tenido a Arod por 16 años, de los cuales solamente han seleccionado un jugador ofensivo en la primera ronda del draft una única vez, pero ni siquiera un jugador que ayudará al mítico pasador, si no a quien podría reemplazarlo, tomando a Jordan Love en la recta final del draft del 2020.

Y lo que por la tarde del 28 de abril, horas antes del draft, parecía una falsa amenaza, una de esas noticias que se filtran porque a alguien le interesa que se filtren (en este caso Rodgers con la intención de presionar a la gerencia a seleccionar armas que lo ayudarán) hoy, acabada la primera ronda y habiendo seleccionado al esquinero Erick Stokes (tremendo jugador, solo no lo necesario), parece más una realidad.

Si tú estuvieras en una relación y le dijeras a tu pareja “oye, si vuelves a manejar como loco/a terminamos”, y la próxima vez que subieran al automóvil conduciera como desquiciado/a, pues lo normal sería que sobre advertencia no hay engaño, no solo porque no te gusta que maneje así, si no porque le comunicaste tu molestia y sus intereses siguieron siendo más importantes que los tuyos.

Que a ver, el primer defensor de que no hay nadie por encima de la organización soy yo, pero no te está pidiendo que le cambies el nombre al estadio o alguna locura, solo que le des un poco de apoyo que se ha ganado.

Los años siguen pasando para el que muchos, yo incluido, consideran es el mariscal más talentoso que ha pisado un emparrillado, dudo que siga queriendo desperdiciar los pocos que le quedan en una franquicia que no solo no ha sido capaz de capitalizar oportunidades únicas, si no que tampoco le ha dado su lugar, o al menos yo no lo querría.

El tiempo corre, si bien cinco equipos en la primera ronda del draft satisficieron parcialmente su necesidad de un pasador, solo hay 4 o 5 equipos que preferirían a su mariscal por encima del actual jugador más valioso de la liga en toda la NFL.

Los Packers dijeron la frase clave para saber que vas a cambiar a tu jugador: “no vamos a cambiarlo”, dejando realmente ver que no es que no lo van a cambiar, sino que las ofertas que llegaron por el, no son suficientemente buenas.